Periostitis tibial

La periostitis es uno de los eternos fantasmas junto con la fascitis plantar más temidos entre los muchos que nos podemos encontrar los corredores...

La periostitis se produce por una inflamación de una de las dos capas que envuelven el hueso, así la periostitis hace referencia según su nombre: peri=alrededor ostio= hueso.

La periostitis puede venir a visitar nuestras piernas por muchas razones, normalmente es por las vibraciones continuadas que recibe la pierna,  por eso muchos atletas corren con cintas por debajo de la rodilla intentando disminuir las vibraciones, también tiene mucho que ver el calzado si es poco amortiguado para nuestro peso, daros cuenta que el impacto que reciben nuestras articulaciones cuando corremos, es el de nuestro peso multiplicado por 3, es decir si yo peso 80 Kg. mis pies y mis articulaciones, sufren impactos por 240kg, así que figuraros si es importante la amortiguación de las zapatillas y las vibraciones que reciben nuestras piernas.

El sobreentrenamiento, el cambio de superficie o el aumento brusco de volumen de entrenamiento pueden ser causas también.

La periostitis es una agravación de una lesión anterior mucho mas fácil de remediar que es una tendinitis en la inserción del músculo tibial, seria mas fácil de remediar si parásemos con los primeros dolores...pero ya sabemos que los corredores no somos así y corremos hasta que nos duele en serio,

Lo mas engorroso de la periostitis es el tiempo de recuperación, los corredores hay una cosa que genéticamente no tenemos que es la virtud de LA PACIENCIA, y hay que tener claro que con esta lesión, la paciencia es la mejor medicina, es verdad que cuando se deja de correr se nota mejoría rápidamente pero si se vuelve a la actividad antes de tiempo vuelve a doler, esto produce una desesperación total en el corredor que siente que nunca va a salir de la lesión, por eso...PACIENCIA. Si seguimos corriendo con dolor se puede llegar a una fractura por estrés de la tibia así que ojito con hacernos los rambos.

El tratamiento a base de antiinflamatorios, con hielo, fisioterapia (kinesiología)...pero lo mas importante DEJAR DE CORRER.

Cuando tu medico te diga que puedes empezar a correr, es muy importante la progresión, hazlo empezando con cargas pequeñas de trabajo y compleméntalas con sesiones de gimnasio para fortalecer los músculos de la zona, los estiramientos son imprescindibles.